miércoles, 20 de agosto de 2008

Se sienten pasos



Algunos científicos aseguran que en poco menos de 50 años los humanoides aumentarán el placer entre las sábanas y evitarán el contagio de enfermedades. Se comercializó la primera muñeca durante un congreso de robótica en Holanda. "­Imagínenselo: sexo a voluntad, las 24 horas, los siete días de la semana” exclama David Levy, autor de Sexo con los Robots: la evolución de las relaciones Humanos-Robots.

Como es de saber, el tema sexual siempre capta la atención de las personas, ya que posee una complejidad infinita que evoluciona, y que en algunos casos, involuciona considerablemente a medida que el tiempo avanza.

Ante la aparición de los llamados “robots sexuales”, inmediatamente surgen cuestionamientos en el rendimiento sexual tanto en el hombre como en la mujer, enfocados meramente en el placer. La pregunta es ¿puede un robot satisfacer más que un humano?. Si dejamos que el ego de nuestro lado animal repose por unos minutos podremos analizar de manera fría este capítulo que dejó de ser ciencia ficción.

Si habláramos de personas que tienen inclinación por el uso frecuente de aparatos sexuales de última generación y a gran escala, o de aquellos que encuentran regocijo en algún creativo fetiche ,o aquellos que poseen un sentido aventurero capaz de convertirlos en máquinas todo terreno; podríamos hablar de un grupo de personas que, probablemente, se verían tentadas en poner a prueba la capacidad de estas nuevas máquinas.

Viéndolo desde otra perspectiva, esto podría ser el estímulo que necesitamos, tanto varones como mujeres, para preocuparnos en mejorar nuestro desempeño sexual con nuestra pareja o parejas en el caso de algunos, de tal modo en que no nos veamos remplazados por tecnología de punta. Sin embargo, no podríamos tener la certeza de estar en la postura correcta, haría falta hacer una investigación acerca de las diversas opiniones que encontraríamos en este tema, acompañada de una prueba de producto, lo cual ya no sería algo difícil de hacer en algunas sociedades.

De lo que si estamos seguros es que si había competencia, pues ahora la hay más y de última generación, así que nos quedan dos cosas por hacer, aprender más sobre como satisfacer a nuestra pareja o estudiar un curso de desactivación robótica.

Escrito por Isaac Guarderas M.

Vía: http://www.infobae.com/ , http://www.neoteo.com/

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